Hola, quería realizar la siguiente cuestión: En el primer libro El Ser Uno, afirma que nosotros estamos en su subconsciente de El Ser Uno. La pregunta es la siguiente
¿Dios nos escucha cuando le hablamos?
¿Cuándo rogamos, y rogamos, una solución, y, miramos al cielo, esperando una respuesta, somos oídos?
¿Cuándo damos gracias a la vida por todo lo que tenemos, con quién hablamos?
... Muchas gracias a todos…
Nuria.
RESPUESTA:
RESPUESTA:
Estimada Nuria…
Ante todo, queremos agradecerle su pregunta, es profunda, porque abarca el contexto, donde todos nosotros, seres pensantes de nuestro planeta, nos encontramos.
Efectivamente, en el primer libro, nos dicen los maestros Ayaplianos, que nosotros somos una célula-planeta, pertenecemos al Sistema Digestivo, y, como tales, somos la dimensión primaria, mundos inferiores, y, por serlo, estamos ubicados en el subconsciente de EL SER UNO
- ¿Por qué? -
Partamos del conocimiento, que nosotros somos energías-pensamientos, y, que estamos en la zona tres, de la mente universal (El Ser Uno) Esta zona, es la más conflictiva, y controversial, que existe.
Las energías-pensamientos que viven en esta zona, en la actualidad, (nosotros), nos encontramos divididos, más o menos, de esta forma: 30% de energía-pensamiento positivos-conscientes y despiertos, y 70% de energías-pensamientos negativos-enfermos-dormidos.
Las energías-pensamientos que viven en esta zona, en la actualidad, (nosotros), nos encontramos divididos, más o menos, de esta forma: 30% de energía-pensamiento positivos-conscientes y despiertos, y 70% de energías-pensamientos negativos-enfermos-dormidos.
La realidad inconsciente, de los 70% de energías-pensamientos-negativos-enfermos, viven en las zonas 1 y 2 del cerebro, por lo tanto, serán clasificadas por el universo como energías-pensamientos que no tienen consciencia de sí mismos, y, según las explicaciones que nos dan los hermanos, este tipo de pensamientos están dormidos, son como los sonámbulos que nacen, viven, procrean y mueren, sin saber a ciencia cierta, lo que sucede con ellos.
El otro 30% de energías-pensamientos-positivos-conscientes, viven su realidad, de acuerdo a una realidad más elevada, y, también, más allá de sus pensamientos, o sea, en la zona cuatro, y, tal vez, cinco.
Serán clasificadas por el universo, como energías-pensamientos conscientes, despiertos, conocedores y sabedores de sí mismos, y de su entorno.
Serán clasificadas por el universo, como energías-pensamientos conscientes, despiertos, conocedores y sabedores de sí mismos, y de su entorno.
Saber la ubicación de nuestras energías-pensamientos, tener la consciencia de conocer, y, entender dónde nos encontramos, es muy importante, porque, según nuestra localización, seremos escuchados, o no, por la Mente Universal, de EL SER UNO.
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Todos nosotros tenemos en nuestro cerebro, el subconsciente, y, éste está lleno de energías-pensamientos: muy complejos, de miedo, recelosos, apabullantes, desalentadores, sufridos, sufrimiento, ansiosos etc…., son energías-pensamientos, que están ahí, en el infierno de nuestro subconsciente incomodándonos, pero, nosotros, no le hacemos caso, somos indiferentes a su clamor, y, a sus gritos, estos pensamientos quieren ser trabajados, analizados, observados, examinados, investigados, profundizados, y, todo lo que un buen sicoanálisis haría en nuestra vida.
¿Las escuchamos, nos preocupamos, las analizamos, les hacemos caso, sabemos que existen?
No ¿verdad?
Pues, esto es lo mismo, que sucede con EL SER UNO.
Mientras que nosotros, no nos preocupemos de esas energías-pensamientos, nunca sabremos que existen.
Pero, si analizaríamos nuestra vida, descubriríamos que hay una infinidad de energías-pensamientos en nuestro subconsciente, las cuales nos producen: alergias, enfermedades, sufrimiento, ansiedad, miedos, emotividad, distorsión, falta de entendimiento, y mucho más, emociones tan escondidas y ocultas, que muchas veces, no sabemos qué nos pasa, y, no podemos darle explicaciones, porque nunca supimos que “ellas” tenían vida propia, que estaban camufladas, y, que vivían dentro de nosotros.
Pero, si analizaríamos nuestra vida, descubriríamos que hay una infinidad de energías-pensamientos en nuestro subconsciente, las cuales nos producen: alergias, enfermedades, sufrimiento, ansiedad, miedos, emotividad, distorsión, falta de entendimiento, y mucho más, emociones tan escondidas y ocultas, que muchas veces, no sabemos qué nos pasa, y, no podemos darle explicaciones, porque nunca supimos que “ellas” tenían vida propia, que estaban camufladas, y, que vivían dentro de nosotros.
Por este motivo, EL SER UNO, mando a sus hijos-pensamientos, a los confines de su universo, porque él sintió que algo en él, no estaba funcionando bien.
Así pues, nuestros hermanos Ayaplianos, llegaron con sus “naves-pensamientos”, y, aterrizaron, aquí, en esta célula llamada Tera, con el único propósito de curarnos.
Cuando ellos llegaron se encontraron con una realidad aplastante, oscura, tenebrosa, y asustadora, se confrontaron con la oscuridad que no conocían, y, al salir de sus “naves”, se distorsionaron.
Cuando llegaron a recuperarse, supieron que habían entrado a una realidad, que ni EL SER UNO, conocía, y, a través de sus investigaciones, y estudios, la llamaron: Subconsciente.
Cuando llegaron a recuperarse, supieron que habían entrado a una realidad, que ni EL SER UNO, conocía, y, a través de sus investigaciones, y estudios, la llamaron: Subconsciente.
Hoy, EL SER UNO, sabe que existimos, nos conoce, y nos está reintegrando, a su realidad consciente.
Por esta razón, recibimos tanta información, mensajes, conocimiento, y, manifestaciones de un despertar.
Es EL SER UNO, que está trabajando las energías-pensamientos de su subconsciente, o sea… nosotros.
Cuando rezamos, levantamos nuestra mirada al cielo, rogamos y le hablamos -
Él, NOS ESTÁ ESCUCHANDO -
siempre y cuando, hayamos despertado la consciencia de nuestro SER.
Pero, si continuamos siendo sonámbulos, entonces él no podrá oírnos, ni conversar con nosotros, no existimos para él, porque estamos
- DORMIDOS EN LA OSCURIDAD -
en la inconsciencia, irrealidad, fantasía, alucinación, y, en la ausencia total de una existencia sin luz.
EL SER UNO NO EXISTE EN LA OSCURIDAD, ÉL EXISTE EN LA LUZ…
Camino del Ser.
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